SALUTACIÓN A LOS LECTORES

Este blog de análisis y reflexión, nace con la pretensión de contribuir al debate sobre el futuro y la SOStenibilidad del Sistema Sanitario Público en España, desde la óptica de los valores y principios de la Bioética, asumiendo la calidad y la excelencia como imperativos éticos.

lunes, 13 de diciembre de 2010

LOBOS ESTEPARIOS


Me identifico mucho con la espléndida metáfora de Hermann Hesse como modelo valorable, en lo personal y en lo profesional.
Con respeto absoluto hacia otros posicionamientos, considero lo mejor el seguimiento de una trayectoria individual, independiente y autónoma.
Por supuesto que, como animales sociales que somos, todos estamos influenciados por improntas ajenas. Muy poco seríamos sin ellas pero, sin despreciar su aportación, me quedo con la esencia del estilo propio.
Una vez aprehendidas y asimiladas todas esas impregnaciones (familiares, ambientales, culturales, antropológicas, filosóficas, sociológicas, artísticas y políticas), creo que lo mejor es el cultivo de la marca genuina.
Todos somos el resultado de la combinación entre muchos elementos: genética, educación,  geografía, historia, suerte y el tiempo que nos tocó vivir (fácilmente se observa lo mucho que interviene el azar).
Además, cuentan las aptitudes de cada cual, sus valores y actitudes, la salud y la fortaleza, las habilidades y destrezas, los intereses y la constancia en su persecución, el acierto respecto a la coherencia entre las metas y las posibilidades reales, etc. Son las distintas cartas con las que inevitablemente jugaremos la partida de la vida en sociedad.
Desde una cierta crítica al tópico del individualismo español y admitiendo la bondad de las  tendencias asociativas y el corporativismo, en tanto que experiencias útiles e integradoras frente a la radical soledad del individuo coetáneo, no creo que la militancia sea la única ni la mejor opción.
He observado tanta aceptación del pensamiento único y tanto abandono de la propia capacidad de análisis, en aras de la voluntad del líder y de sus consignas, que huyo de las listas de manera casi instintiva.
Me pareció muy acertada la reciente crítica de Vargas Llosa a los nacionalismos (discurso de aceptación del Premio Nobel de Literatura).
Coincido plenamente con su cuestionamiento.
En el mundo de la comunicación, sin renunciar a lo propio de cada tierra (cultura, costumbres, esencias, folclore, gastronomía, tradiciones, lengua…) estoy por la evitación de todo lo que integre excluyendo.
Creo que una de las mayores cualidades de la democracia consiste en que nadie sepa, de antemano y con certeza, cual será el sentido mi voto. Por ello he evitado siempre pertenecer a un partido ó a un sindicato, sin juzgar negativamente a los que optaron por esa opción.
¿No les produce cierto malestar saber que su voto está “contado” de antemano y la suposición ajena de que será para los mismos siempre?
Si absolutamente todos tuviésemos adscripción política no serían necesarias las elecciones, sólo las matemáticas. Continuaría siendo estrictamente democrático, pero el sistema de derechos y libertades quedaría muy desnaturalizado.
El problema no radica en la pertenencia al “club” o en el asociacionismo,  sino en el ciego seguimiento de la línea emanada del “aparato”, lo que empobrece la crítica y fomenta el pesebre.
¡Cuidado con los staff, los sanedrines, las directivas, las jerarquías y las nomenclaturas!.. ¿Quién controla a los controladores?
A diario oigo conversaciones parecidas a ésta:
-Se sospecha que Fulano, desde el  puesto que ocupaba,  ha podido estar robando...
 ... e inmediatamente, la contestación es:
-Más habrán robado ellos
¿De verdad que con esa respuesta puede darse por zanjada la cuestión?
¿Hasta ahí llega el interés en el esclarecimiento sobre la verdad de lo denunciado?
¿Aguien cree, firmemente y con decencia, que todos los “suyos” son buenos y todos los “otros” son malos?
¿Es defendible esa miope postura desde una óptica intelectual, ética y racional?
El mismo símil vale para todos los ámbitos:
¿Es así como ha de hacerse, sólo porque lo dice el jefe?
¿Deben ser los responsables “fichados” sólo por compartir ideario o ser amigos?
Cuando los que pagamos somos los contribuyentes:
¿No habla nuestra Constitución de publicidad, igualdad, capacidad y mérito?
¿Y las trayectorias de las personas? ¿Y el empeño y la dedicación?
¿Qué pasa con el talento y el conocimiento? ¿Qué hay del curriculum?
¿Se le identifica como honrado a carta cabal? ¿Se le conocen maldades?
¿No habíamos superado la endogamia de la tribu?
Está muy bien trabajar en equipo compartiendo creencias, ideologías,  proyectos, deseos, esfuerzos e ilusiones pero abogo más por lo personal, lo auténtico de cada cual, su estilo peculiar y su especial singularidad para recorrer el itinerario vital.
En definitiva, por lo que nos hace a cada uno de nosotros, únicos e irrepetibles como auténticos “lobos esteparios”.

Artículos relacionados:

-“Gestión Virtual en los Hospitales Públicos”. Revista “Medical economics”, 2007.
- “El Hospital del Futuro y el Perfil de sus Gestores”. Revista “Sedisa, siglo XXI”, 2010.




1 comentario:

  1. Mas que lobo espetario...eres Tatanka.
    Recuedas?.
    Bailando con lobos.
    Un saludo.

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